La crisis sanitaria producto del SARS COV 2 ha producido un impacto de dimensiones insospechadas en materia de emprendimiento y laboral. Empresas de todos los tamaños han cerrado sus puertas ante la crisis productiva generando desocupación, ralentización de los procesos productivos y produciendo una vuelta viciosa que nace se atreve a anticipar cuando es que va a terminar.
Grandes empresas cierran sus puertas

La conocida línea aérea Latam desvinculó a 1.400 trabajadores debido a los impactos del Covid-19, según lo que señaló el portal de noticias chileno emol.com. Roberto Alvo, CEO de la empresa señaló “que no tienen ninguna otra opción, excepto la de achicar el grupo”.
Desvincular 1.400 trabajadores no solo impactará en los familiares directos de los nuevos desempleados, sino que también impactará en el entorno mediano y extremo de estos, porque se corta la cadena de consumo y el efecto de la crisis del desempleo se propagará como el efecto dominó.
Pequeñas empresas quebrarán antes de lo presupuestado
La gran mayoría de los pequeños emprendimientos comenzarán una vertiginosa carrera hacia el cierre de sus operaciones; muchos lo harán porque simplemente no tienen opción, sus productos o servicios dejarán de ser consumidos, en especial por las familias de los trabajadores de aquellas empresas que tuvieron que desvincularlos.
En Estados Unidos 2.25 millones de personas presentan su solicitud de desempleo
“Los estadounidenses están comenzando a perder sus empleos en respuesta a la pandemia de coronavirus, y los economistas esperan que todo empeore a partir de aquí. Y rápidamente también.” señalaba el portal de noticias news24.com
El comercio entre países se va a ver enlentecido
Como consecuencia de todo lo anterior, además de las restricciones impuestas para frenar el avance de la pandemia, el comercio de los países se va a ver disminuido y es muy probable que este detonante impacte en aquellas empresas que estaban indecisas de cerrar y despedir; lo que se vendrá, entonces, es una segunda fase de cierres y despidos masivos.
La decisión de los Gobiernos es dura: O mantengo una cuarentena y freno la economía, o dejo a la economía funcionando y que el SARS Cov-2 haga de las suyas.

Parece ser que dejar que el Covid-19 haga de las suyas ha sido la decisión de varios gobiernos. Brasil, Estados Unidos, Suecia, Inglaterra adoptaron una estrategia de proteger la economía y que la madurez de la población los guíe para evitar los contagios, pero esto no ha dado resultados. Otros, en cambio, han decidido frenar todo tipo de actividad, pero la medida ha traído como consecuencia el quiebre de la economía local; en realidad, la solución no es la una ni la otra. Países como Paraguay ha sido capaz de mediar entre la cuarentena y la economía las medidas necesarias para tratar de mantener a sus ciudadanos en condiciones de buena salud, un sistema sanitario controlado y una economía en movimiento; sin embargo, desgraciadamente, Paraguay no se encuentra solo en el mundo, se encuentra inserto en un concierto de naciones, de las cuales las más cercanas son el MERCOSUR, Sudamérica y el resto del mundo, naciones de la cuales depende, al igual que cualquier otro país.
Qué podemos hacer nosotros como personas
Hay muchas cosas que se pueden hacer, primero que nada, mantener la salud mental sana, comprender cual es la situación que cada uno esta viviendo en lo particular y, a partir de allí, tomar decisiones. La familia y el entorno de amigos más cercano son fundamentales en el éxito de cualquier decisión que se tome. Organizarse como comunidad, a nivel familiar y luego a nivel social cercano es un factor crítico de éxito. El apoyo entre todos como comunidad es una cuestión que hará la diferencia.
Tomando decisiones
Lo primero que debemos hacer como familia es analizar nuestro entorno inmediato, comprender como están nuestras finanzas, estimar cuales son nuestros activos y cuales son nuestros pasivos; en el caso de existir deudas, se recomienda negociar con acreedores para evitar caer en mora y cerrar las puertas al crédito. Es extremadamente necesario comprender que activos realizables se poseen: cuentas de ahorro, bienes para liquidar, y determinar con que cantidad de dinero dispongo, como familia, para invertir.
Una vez que tengo claro lo que tengo, lo que dispongo y lo que debo, el siguiente paso es determinar para que “somos buenos”, para que servimos, cuales son nuestras fortalezas, y créanme que son más de las que se imaginan.
Cuando he comprendido que fortalezas tengo, entonces me pongo a mirar mi entorno externo para ver que oportunidades me ofrece. Es impresionante como muchas pequeñas empresas familiares se han reinventado en estos meses de crisis. La pregunta que surge es ¿Está uste preparado?
Junto a lo anterior, debe comprender para que no es tan bueno, y determinar sus debilidades. De este modo sabrá en que mejorar o en que rubro no entrar.
Finalmente conocer las amenzas que se presentan en su entorno le permitirá determinar riesgos, gestionar dichos riesgos y, de este modo, adaptarse a un entorno que escapa de sus manos y que de no comprenderlo podría tener consecuencias desconocidas.
Cualquier decisión que tome DEBE estar sustentada por evidencia, no puede tomar decisiones porque Usted cree que es lo mejor; las decisiones acertadas son aquellas que se basan en la evidencia.