La historia de Barto es un ejemplo de la triste realidad de muchos animales abandonados y maltratados. Afortunadamente, encontró a personas compasivas y dedicadas que le brindaron una segunda oportunidad en la vida.
Berta y Marcelo al rescate
Después de ser rescatado por Berta y Marcelo Olivier, Barto recibió atención veterinaria de la Dra. Michelle Leon, quien pudo diagnosticar y tratar sus diversas condiciones de salud. La desnutrición, los tumores testiculares y la artrosis son problemas comunes en animales que han sido abandonados y descuidados.
Gracias al rápido accionar de la Dra. Leon y los cuidados adecuados proporcionados por Berta Olivier, Barto comenzará a recuperarse rápidamente. Actualmente los tratamientos y medicamentos administrados ayudaron a mejorar su condición física y a aliviar su sufrimiento.
En los próximos días se espera los resultados de una ecografía para descartar otras patologías, poder ingresarlo a una clínica para que se le puedan extirpar ambos testículos y disminuir al inflación de la próstata que lo aqueja.
En los momentos en que se redactaba este artículo, Bartos dormía placidamente en un lugar de la sala en la casa de Berta Olivier habilitado para él. Al menos, a partir de ahora, no volverá a pasar frío, hambre ni sed, tampoco se le negará un derecho no regulado para los animales: el derecho a la salud.
En necesario castrar a Barto para eliminar dos tumores testiculares
La veterinaria también recomendó la castración urgente de Barto, lo que además es una medida importante para controlar la población animal y prevenir enfermedades relacionadas con los órganos reproductores, en este caso resulta urgente para evitar que el tumor en uno de los testículos comprometa más el estado de salud del perro. Esta intervención sería programada una vez que se obtuvieran los resultados de los exámenes de sangre completos y un ecografía.
Un nuevo hogar seguro
En su nuevo hogar con Berta Olivier, Barto ha encontrado un lugar seguro y lleno de amor. Berta, una ex atleta senior chilena, es una persona comprometida con la protección de los animales y ha demostrado su empatía hacia aquellos que han sido abandonados por otros seres humanos.
Berta Olivier, profesora de Escuela Normas ISO, deportísta chilena, rescatista animal señala que «es común ver en las ciudades de la V Región numerosos perros abandonados por sus dueños. Es como si los cachorritos fueran juguetes, como peluches, pero cuando crecen o envejecen pasan a ser una molestia para los propietarios. Criar un perro es una responsabilidad de por vida, mínimo 10 y más años de responsabilidad. Criar un perro inicia con el disfrute de la tierna infancia del canino, luego la adolescencia y sus cambios de temperamento, para seguir con la etapa madura y culminar con el proceso de vejez, que es el momento de sus vidas que más necesitan de sus humanos. Tirar un perro a la calle es un acto demencial, incomprensible, alarmantemete peligroso, porque va más allá de enviar el perro a las calles, es un riesgo para la salud pública, y por consiguiente una responsabilidad de todos».
Adopción responsable y compromiso con el animal que se posee
La historia de Barto destaca la importancia de la adopción responsable de mascotas y la necesidad de brindarles cuidado, atención médica y, sobre todo, cariño. A través de historias como la de Barto, se espera generar conciencia sobre la crueldad animal y promover el respeto hacia todos los seres vivos, independientemente de su especie.
Tal como señala la rescatista animal, Profesora Berta Olivier, «la adopción de un cachorro es un acto de responsabilidad social ya que un compromiso de vida con un ser que puede vivir, 10, 14, o más años. Antes de adoptar un cachorro, sea comprado o regalado, se debe pensar si se será un proceso sostenible y sustentable».
Marcelo Olivier, por su parte señaló que abandonar un perro es un crímen que debería ser castigado con carcel. «Deberían existir leyes más estrictas de manera que se impusieran barreras claras para evitar la adopción irresponsable. No basta con lo que existe hasta ahora, se requiere de mayor control. Esa es la única manera de que la sociedad comprensa que el abandono es un acto de irresponsabilidad enorme, que daña, no solo al animal que se abandona, sino que a la sociedad entera, ya que un animal sin control es un vector de infecciones tanto para él como para los ciudadanos».
Qué es la crueldad animal
La crueldad animal se refiere a cualquier acto intencional que cause daño, sufrimiento o muerte a los animales. Estos actos pueden ser llevados a cabo por individuos, grupos de personas o incluso industrias. La crueldad animal puede manifestarse de diversas formas, como el maltrato físico, la negligencia, la explotación o el abuso emocional.
El maltrato físico de los animales implica golpear, patear, lanzar, apuñalar o causarles cualquier tipo de daño físico. También puede incluir la tortura deliberada, como quemar, envenenar o mutilar a los animales. La negligencia se produce cuando se priva a los animales de sus necesidades básicas, como alimentación adecuada, agua, refugio y atención veterinaria.
Explotación animal una felonía imperdonable
La explotación animal se produce en industrias como la ganadería intensiva, la experimentación animal y la industria peletera. Estas industrias someten a los animales a condiciones de vida inhumanas, estrés constante y sufrimiento antes de ser sacrificados para obtener productos como carne, cuero o pieles.
Abuso emocional y confinamiento
El abuso emocional hacia los animales se refiere a acciones que causan angustia psicológica, como el confinamiento en espacios reducidos, la privación de estimulación adecuada o el entrenamiento cruel.
La crueldad animal es ampliamente condenada por la sociedad y en muchos países existen leyes para proteger a los animales de actos crueles. Además, se promueve la educación y la concientización sobre el trato ético hacia los animales, así como el fomento de leyes más estrictas para prevenir y sancionar la crueldad animal.
Es importante denunciar cualquier forma de crueldad animal que se presencie o se sospeche, para que las autoridades competentes puedan tomar medidas y proteger a los animales de estos actos inhumanos.
Leyes específicas de protección a los animales en el Mercosur
Argentina:
Ley Nacional N° 14.346: Esta ley establece sanciones para aquellos que cometan actos de crueldad hacia los animales. Prohíbe el maltrato y la crueldad, así como también la caza y captura de animales de manera cruel.
Chile:
Ley N° 20.380: Esta ley establece normas sobre protección de animales y sanciona el maltrato animal. También regula la investigación científica utilizando animales, la comercialización de productos de origen animal y la tenencia responsable de mascotas.
Paraguay:
Ley N° 4840/13: De protección y bienestar animal. Esta ley establece normas para la protección de los animales y sanciona el maltrato y la crueldad hacia los mismos. También regula la tenencia responsable de mascotas y la protección de animales en situación de calle.
Bolivia:
Ley N° 700 Para la defensa de los animales, contra la crueldad y el maltrato: Esta ley establece disposiciones para la protección y el bienestar de los animales en Bolivia. Prohíbe el maltrato y la crueldad animal, y establece sanciones para quienes los cometan.
Uruguay:
Ley N° 18.471: Ley de protección, bienestar y tenencia de animales. Esta ley establece disposiciones sobre el bienestar animal y la protección de los animales en Uruguay. Prohíbe el maltrato animal, regula la experimentación científica con animales y establece sanciones para quienes cometan actos de crueldad.
Brasil:
Ley Federal N° 9.605/1998 (Ley de Delitos Ambientales): Esta ley establece sanciones penales para aquellos que cometan actos de crueldad animal, como maltrato, mutilación, caza ilegal y otros delitos relacionados con la fauna silvestre.
Ley Federal N° 11.794/2008: Esta ley regula el uso de animales en actividades de enseñanza e investigación científica, y busca garantizar su bienestar y protección.
Ley Federal N° 9.605/1998, Artículo 32: Este artículo específico de la Ley de Delitos Ambientales establece penas de prisión y multas para quienes practiquen actos de crueldad animal, incluyendo el maltrato, la tortura y el abandono de animales.
Adicionalmente existen leyes en materia de protección animal en cada Estado de Brasil, este marco regulatorio busca garantizar la protección del animal en diferentes aspectos; sin embargo, la legislación no es suficiente, se requiere de una toma de conciencia por parte de los ciudadanos de manera de que todos los seres humanos y animales podamos vivir en armonía, en paz y salud.